martes, 25 de mayo de 2010

Monta sobre mi.


Pintura de Rick Herold

Monta sobre mi

Súbete en mí como chiquilla
Para templarte como a un muchacho
Ahí. Así. ¿Te sientes macho?
Te entro y penetro cual mantequilla

Con el cuchillo, de esa manera
Puedo templarte toda la boca
Pasar mi lengua que se descoca
¡Y que es tan suave y hasta ramera!

Veo tus ojos por donde hundo
Mis propios ojos hasta tu alma
De donde vuelvo con una palma
De la lujuria en mi yo profundo.

Acaricio la espalda como destellos,
Los costados ardientes y frescos, la nuca,
La agraciada doble peluca
De tus axilas y tus cabellos.

Como a caballo tu culo encaja
Entre mis muslos ligero en peso
Al removerla con embeleso
Para que goces con esta paja.

Y gozas mucho mi muchachito
Mientras contemplo tu hermosa vara
Que crece rápido y se te para
Pues bien desea ser fiel al mito.

¡Qué tiesa, cielo! la perla, la gota
Que se adelanta, sale brillosa
Por el meato puro de rosa
Y me la trago, mientras explota

Todo el fluido. La gran empresa
Al poner rápido en mi labio
Tu glande amado, febril, pesado
Que me dispara la regia presa.

Leche suprema, divina aurora
De flor de almendro que me aletarga
Donde sacío mi sed amarga
La sed de ti que me devora

Sigue su rumbo, rico y dadivoso
El encanto de tu adolescencia,
Al comulgar con su pura esencia
Mi cuerpo ebrio de estar gozoso.

(1891)

Poema del cuaderno "Hombres" de Paul Verlaine
traducida por Willian Navarrete

No hay comentarios:

Publicar un comentario